Todo aquel aficionado a la comida china que merezca ser llamado como tal ha de saber que, de todos los suplicios con los que en nuestra triste existencia tenemos que cargar, el peor es tener que llevar el pedazo de sushi hasta el plato de salsa (que suele estar por lo menos a 15 centímetros, hay que ser cruel) para después llevárnoslo a la boca. Ríase usted de los mineros picando piedra, oiga.
Hartos de tan sobrehumano esfuerzo, una serie de pensadores que se relamen con el cerdo agridulce han hallado la solución al problema: los palillos con dosificador de salsa. Llénalos de salsa antes de sentarte a la mesa, coge el trozo de sushi y presiona ligeramente el palillo para regarlo de ese delicioso e indescriptible caldo marrón rojizo. Podrás llenar cada palillo de una salsa diferente para hacer combinaciones que tentarían a los dioses, y además se pueden utilizar como dosificador de colirios.
Hartos de tan sobrehumano esfuerzo, una serie de pensadores que se relamen con el cerdo agridulce han hallado la solución al problema: los palillos con dosificador de salsa. Llénalos de salsa antes de sentarte a la mesa, coge el trozo de sushi y presiona ligeramente el palillo para regarlo de ese delicioso e indescriptible caldo marrón rojizo. Podrás llenar cada palillo de una salsa diferente para hacer combinaciones que tentarían a los dioses, y además se pueden utilizar como dosificador de colirios.
A mi el mp3 antiacné me ha dejado sin palabras, jajajajaja... aunque esté también... si hubiera alcanzado la destreza necesaria con los palillos chinos después de tantos años de práctica te diría que es genial, pero como yo sólo me sirvo con tenedor...
Ya me iré pasando por aquí! :)I merciii per llegir-me...
Increíble lo de los palillos..lástima que no sepa usarlos porque me parece que queda muy interesante comer con ellos xD
Bueno será cuestión de ponerse y de práctica :P