Si eres de los que les da miedo acercarse a una cucaracha, o eres capaz de acercarte pero incapaz de pisarla porque no soportas ese crujido tan característico bajo tu pie, estas son tus zapatillas. Se trata de un par de pantuflas con mango retráctil, de forma que puedas emplearlas a distancia como un matamoscas. Lo que no sé es hasta qué punto no es más sencillo coger la escoba y así poder caminar por casa sin unas zapatillas que deben pesar medio kilo cada una y sin el mango asomando 15 centímetros por el talón, pero bueno.

1 comentarios

  1. T // 3 de junio de 2009, 7:52  

    Me ha emocionado al principio, porque yo soy de ésas a las que les da el mismo asco ver una cucaracha viva que matarla.

    Pero va a ser que el invento deja mucho que desear.